Avalancha de bicicletas baratas

En diversos países y épocas ha habido comerciantes que han recurrido a un método bastante original para despachar sus mercancías de mediana calidad. Empezaban por publicar en periódicos y revistas de gran difusión el anuncio que reproducimos.
¡Una bicicleta por diez duros!
Cualquiera puede adquirir una bicicleta, invirtiendo sólo 10 duros.
¡Aproveche esta ocasión única!
10 duros en vez de 50.
REMITIMOS GRATUITAMENTE EL PROSPECTO
CON LAS CONDICIONES DE COMPRA.
Había no pocas personas que, seducidas por el fascinador anuncio, solicitaban las condiciones de esa compra extraordinaria. En contestación al pedido, cada persona recibía un prospecto extenso que decía lo siguiente:
Por el momento, por 10 duros no se le enviaba la bicicleta, sino sólo cuatro billetes, que tenía que distribuir, a 10 duros, entre cuatro conocidos suyos. Los 40 duros recogidos debía remitirlos a la empresa y entonces le mandaban la bicicleta; es decir, que al comprador le costaba efectivamente 10 duros y los otros 40 no los sacaba de su bolsillo. Cierto que además de los 10 duros al contado, el comprador de la bicicleta tenía que soportar algunas molestias para vender los billetes entre los conocidos, mas este pequeño trabajo no valía la pena de tenerlo en cuenta.
¿Qué billetes eran éstos? ¿Qué beneficios alcanzaba el que los compraba por 10 duros? Obtenía el derecho de que se los cambiara la empresa por otros cinco billetes iguales; en otras palabras, adquiría la posibilidad de reunir 50 duros para comprar una bicicleta, que le costaba a él, por consiguiente, sólo 10 duros, es decir, el precio del billete. Los nuevos tenedores de billetes, a su vez, recibían de la empresa cinco billetes cada uno para difundirlos, y así sucesivamente.
A primera vista, daba la sensación de que en todo esto no había engaño alguno. Las promesas del anuncio quedaban cumplidas; la bicicleta, en efecto, costaba al comprador 10 duros. Y la casa no tenía pérdidas; cobraba por la mercancía el precio completo.
Última modificación: martes, 24 de enero de 2012, 16:32